A propósito de la exposición de Lee Friedlander en Madrid (Fundación Mapfre), os traemos aquí una fotografía que nos ha llamado la atención y a la que le dedicamos este artículo.

Se trata de una imagen que junto a otras once se exponen en la muestra y que Friedlander realizó en su viaje por España en el año 1964. La fotografía con un potente reencuadre de un cartel de carretera con la imagen silueteada de un automóvil Seat 1500 sobre un rotulo del que solo se lee «EN ALGECIRAS» y al fondo la de un «Toro de Osborne», que parece también tener ruedas. Sin duda una imagen poderosa con el sello indiscutible del maestro y que habíamos encontrado entre los testimonios gráficos que hablan estos días de esta magnífica exposición comisariada por Carlos Gollonet. > ver vídeo

Ciertamente el hallazgo fue para nosotros casual, a la vez que mágico, porque debido a la situación derivada de la Covid_19 no hemos podido viajar a Madrid para disfrutarla, pero al interesarnos por ella a través de los medios digitales la descubrimos como parte de un conjunto de fotografías en pared y curiosamente junto a ella una segunda imagen nos ofrecía una vista completa del lugar. Fue como viajar en el tiempo al momento que habría vivido el propio Friedlander a mediados de los sesenta en un país todavía anclado en una sociedad de postguerra. Es sin duda una imagen poderosa y muy representativa de sus métodos con los que consigue maravillosas yuxtaposiciones, en esta caso para enfatizar dos símbolos de la españolidad, como ese mítico modelo Seat, que fue el prototipo de los taxis españoles de su época y que tanto me recuerda a sus icónicas fotografías como la de la portada de libro «América by car«.

Sobre su viaje a España hemos sabido a través de la web de la Fundación Mapfre que «Durante 1964, Lee Friedlander viajó con su familia por Europa gracias a la segunda Beca que recibió de la John Simo Guggenheim Foundation. En esta ocasión visitó por primera vez España, en concreto Madrid y Barcelona, y también el Sur (Málaga, Fuengirola y Mijas), donde tenían unos amigos. Es evidente que donde Friedlander se encuentra cómodo y adonde ha dirigido su interés durante décadas es el paisaje social que mejor conoce, con el que se identifica; la densidad y la intensidad de sus fotografías están ligadas a su entorno habitual, Pero, buceando en su archivo, en las varias cajas de fotografías con la etiqueta «Spain» hallamos un grupo de buenas imágenes que precisamente son «muy Friedlander» y que podrían estar tomadas casi en cualquier lugar», y precisamente eso «determinar el lugar» se convirtió en nuestro reto.

Inspirados por las aventuras del gran Paco Gómez nos pusimos manos a la obra para localizar ese «Lugar Friedlander» como si del «John Ford Point» de Arizona se tratara. La suerte seguía de nuestro lado porque la segunda fotografía tenía elementos suficientes para iniciar una búsqueda.

 

Un Toro de Osborne a 45 km de Algeciras.

En principio no parecía complicado, pero han transcurrido 55 años y las carreteras españolas han dado paso a nuevos trazados con modernas autovías, además se da la casualidad que a esa distancia no hay uno, sino TRES. Dos en el pueblo de Alcalá de los Gazules con sendos «toros» en su término municipal, ambos de tamaño mas pequeño (7 m) lo que viene a coincidir con el que aparece en la fotografía de referencia. El otro está ubicado en Tarifa, concretamente junto a la N-340 en una curva del «Puerto de Facinas». Ya solo quedaba ir a comprobarlo y así lo hicimos. Estuvimos primero en el ubicado en la margen derecha de la carretera de acceso, oeste, al pueblo de Alcalá que quedó descartado por el propio paisaje que le rodea. Luego fuimos al otro, el que está junto al viaducto del rio Álamo, en dirección Algeciras y al día siguiente fuimos a ver el de Facinas que si bien su tamaño es el gigante (14 m) y está en una posición alejada de la carretera es muy posible que el toro original estuviera en un lugar muy próximo ya que el paisaje a pie de carretera es una enorme llanura de una zona agrícola y existe una bifurcación hacia el pueblo. En la actualidad la distancia es de 40 km. hasta Algeciras pero es muy probable que en aquellos tiempos fueran los 45 que marcaba el rotulo y,  sobre todo, la lógica apunta que Friedlander viajaría entre Cádiz y Málaga por la Nacional 340 y no por una vía secundaria en el caso de Alcalá. Ciertamente los alrededores están muy transformados y según hemos leído en la web de Osborne, debido a sucesivos cambios en las Leyes viales en los años 1962 y 1974 muchos de estos toros sufrieron pequeñas reubicaciones y cambios de tamaño para adaptarse a nuevos trazados y para cumplir con la normativa que les exigía retirarse del borde las carreteras. Durante un tiempo y tras su indulto estuvieron solos, ahora comparten el paisaje con otro icono surgido de la modernidad, los aerogeneradores.

Conclusión: El toro actual no es ya el original que se fotografió en 1964 pero, casi sin dudarlo, este de Tarifa es el que ha heredado el lugar y el  título de «Toro de Friedlander» , el del Puerto de Facinas,

 

Analogías

Durante las indagaciones, surgieron muchísimas informaciones curiosas pero nos fascinó encontrar una portada realizada por Paul Hogarth veinte años después, para el libro de Graham Greene «Monsignor Quixote», editado por Penguin (UK). Se trata de una reimpresión de 1984 en la que aparecen los mismos símbolos de la españolidad que utilizó Friedlander, en este caso un modesto pero también mítico Seat 600 acompañado de un toro de Osborne.

Hemos leído que el maestro sigue en activo, que a su 86 años sigue fotografiando a diario,  que no le gustan las entrevistas y que la fotografía sigue siendo su divertimento. Nosotros hemos querido rendirle este homenaje subiendo y bajando colinas, cruzando vallados, esquivando toros de los de verdad y escuchando disparos cercanos en un coto de caza, pero todo se resume en una experiencia maravillosa, una buena excusa para hablar de las emociones, de nuestro pasión por el legado de los grandes maestros y sobre todo para rendir nuestro más sincero homenaje a su obra y a su persona.

En el momento de cerrar este artículo me acaba de llegar un mensaje por whatsapp. Es Juan Valbuena que sin saber que estoy metido en esta aventura, me envía una captura de la sala con la foto en cuestión y me comenta: «Friedlander en Dalind» como el denomina a este peculiar territorio de la Ancha Frontera. Esto ya lo supera todo.

 

Nuestro agradecimiento a Fundación Mapfre, por todo lo bueno que está haciendo por la cultura fotográfica en nuestro país, a Carlos Gollonet, Ana Utrera y Mónica Fuentes por su exquisito trato, a la Fraenkel Gallery de San Francisco y a Rebecca Robertson por su profesionalidad y desinteresada gestión de los permisos, a mi compañero José Mª Bejarano por ponerme en la pista de esta maravillosa aventura y acompañarme en las incursiones campestres. Gracias a todos. En adelante el toro de  Facinas será el Toro de Friedlander.

Os recordamos que la exposición puede visitarse hasta el 10 de enero en la Sala Recoletos de la Fundación Mapfre.

> Descarga AQUI el folleto de la exposición

 

 

 

Photographer: Lee Friedlander

Title: Spain, 1964

Credit: © Lee Friedlander, courtesy Fraenkel Gallery, San Francisco and Luhring Augustine, New York

 

 

Aquí os dejamos una pequeña galería de imágenes sobre la aventura «arqueológica» vivida estos días y la fotografía del lugar donde esta ubicado nuestro Toro Friedlander

 

Las fotografías del reportaje gráfico son de Alberto Galán, José María Bejarano y Juan Valbuena